viernes, 16 de marzo de 2012

Productos dedicados a ir al fondo de la despensa

Llegar con tu compra a casa es muy bonito.
- Hola!
- Hola. ¿Qué has comprado?
- Pues esto, esto, esto, esto, esto para cenar, esto, esto que estaba en oferta, esto, esto, esto y este té de cola de caballo que seguro que sabe a vómito de cabra, pero dicen que es bueno para el tránsito.
- Ah, sí, yo tengo champú de cola de caballo también.
- ¿También es bueno para el tránsito?

No, en serio. Muchas veces compramos lo que sea por tal de llenar la despensa. Si rebosa, nos sentimos mejores personas. Una vez llegue a comprar un 3x1 en papel higiénico. ESO NO HABÍA CULO QUE LO GASTARA. Os invito a retirar los zumos con leche, los chocolates y las galletas, y mirar al fondo de vuestra despensa, donde verdaderamente está la comida que no engorda. Yo lo hice ayer, y esto es lo que me encontré y pude identificar.

Paquete medio abierto de tallarines Mercadona. Menos mal que a la pasta no le sale moho, porque eso ahora mismo sería una croqueta. ¿Habéis oído hablar de esa cosa llamada ''fecha de caducidad de la pasta''? Yo tampoco, hasta ahora.
Un paquete de tostaditas incomibles cogidas con una pinza rosa del tendedero de la vecina. Me las solía comer con mermelada y philadelphia, hace 3 meses.
Una patata verde. 
Una bolsa de nueces de San Antonio. Eso más que nueces parecían pasas. Pero si son de San Antonio, igual también son buenas para el tránsito, así que eso lo reciclo.
Un ajo. Uno solo. Solo uno.
Un brick de nata, 250 ml. No lo gasto por rabia. Me compré un horno en el que no se podían hacer dulces, y esa nata sigue esperando acabar en una bonita tarta.
34 botes de judías, fabada asturiana y cocido madrileño. Para picar entre horas.
Un bote de espárragos, el cual aún sigo sin poder abrir.
Una latita mini de coles de bruselas. ¿En qué momento de mi existencia he comprado yo ésto? Ni siquiera me gustan, ni las pienso probar.
3 o 4 paquetes de sopa de sobre Gallina Blanca. Ya lo dice el refrán, tomar sopa es de sobres.

Creo que no había nada más (reconocible). Las despensas siguen el orden el universo, y haya lo que haya, siempre da para hacer una ensalada. Lo que no sé es donde voy a poner el bote de espárragos, porque eso no hay ser humano que lo abra. Ahora me voy a comer un paquete de galletas que encontré la semana pasada. Le he quitado las 5 primeras capas y pa dentro.

Yo en el fondo creo que las fábricas hacen estos alimentos porque saben que van a acabar allí. Además la mayoría de ellos están colocados en sitios estratégicos: las cajas de los supermercados. Anda que no habré oído yo veces:
- Nena, llévate estos chorizos criollos, que están de oferta.
- Ay, pues mira, sí. Le quito la primera capa y se lo pongo al niño para el desayuno.

Y así con todo.
- Nena, llévate estas latas de callos con berenjenas, que están de oferta.
- Ay, pues mira, sí. Le quito la primera capa y se lo pongo al niño para el desayuno.

Desde chocolatinas derretidas, hasta ofertas de maquinillasdeafeitar+cualquiercosacomestible, pasando por preservativos en mal estado (que no sé porque los ponen ahí, si de ahí nadie los coge), latas de calamares en su tinta, con fotos de calamares, como con pelos, latas de sardinas en aceite, como con pelos, y las cosas que la gente se deja en la caja, que debe ser:
- Son 36,80 €
- Ay, solo me he traido 35. Cariño, deja lo que tenga el envase más feo.
Y así se quedan allí todos los yogures que no tienen fotos de frutas, o los espárragos que nade puede abrir y que Adrián se lleva a su casa. Y llevan una foto de espárragos con mayonesa. Como con pelos.



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